ADMIRACIÓN

Con letras grandes. ¡Con remarcados signos de admiración!

Así es la admiración que siento por la vida, por cada mañana que tengo la oportunidad de sonreír, de saludar a cientos de jóvenes, sí, tengo aproximadamente 500 alumnos y en muchos de ellos veo el brillo de la admiración por mí como si fuera una biblioteca ambulante, como si escupiera significados de palabras, como si mis dedos fueran agujas de brújulas que indican el camino, las palmas de mis manos mapas geográficos, mis ojos: esferas que traslucen el destino, películas de mi pasado y mi voz, el futuro de ellos. Mis orejas pozos infinitos y discretos.Creen que floto, que mis pies no tocan el piso. Mi corazón es un álbum de historias de amor y enmudecen cuando por hacerme hablar cae una lágrima por la celda de mis pestañas.

Mantener mi postura en el ladrillo para no marearme, es admirable.

Admiración es lo que me lleva a enamorarme con más fuerza del amor. Mi concepto de admiración va desde las cosas más simples, sencillas y ordinarias hasta lo que la pasión nos lleva a buscar, lograr, alcanzar.

Esa admiración la veo y siento por mis alumnos. La tienen mis amigos, mis amigas, mi hermana, mis hermanos, mis padres, mis maestros, y mucha, mucha gente.

Es quedarse callado cuando no hay nada que decir.

Es admirable sonreír cuando no hay motivo para ello.

Levantar una basura y depositarla en el bote cuando tantos pies pasan a un lado o encima, la patean pero nadie la recoge.

Transformar el orgullo infundado en palabras de aliento, en abrazos.

Abrir tus brazos y levantar el rostro hacia el cielo mientras te cae la fina lluvia o la primera nevada.

Admirar los talentos de las otras personas por que tú no los posees.

Aceptar a las personas tal y como son, sin pretender cambiarlas, sólo voluntariamente adecuarnos a ellas.

Estar alerta a los milagros de la vida, de la naturaleza, del universo.

Sin confundir la admiración con el amor, ésta es el primer paso hacia el amor, lo que nos lleva al matrimonio y cuando ésta se tambalea, o uno de los dos cae en el abismo sin ánimo de ser rescatado, a veces no nos percatamos del hilo que nos une hasta que se rompe.

Uno puede restablecer el tejido de la relación pero como mencioné anteriormente, hay ocasiones que el orgullo herido accidentalmente hace una costra dura y negra en nuestra pareja, que ni el tiempo puede quitar. Sólo, así mismo.

También es admirable ver como los sueños se hacen realidad sin que se vuelvan pesadillas terrenales.

Tener el valor de expresar tu sentir, tus pensamientos.

Arriesgarte por tus ideales.

Sambullirce en la vida sin visor, sin equipo de esnorquel ni de buceo porque confías salir a flote.

Tomar el coraje de nuestras entrañas para defender nuestros amores y decirles cuánto los amamos.