jueves, 12 de junio de 2008

Bajo el cielo raso

Bajo el cielo raso
vive una angustia enamorada,
de gran elocuencia en el habla
y de un andar que perece.

Bajo el cielo raso
ahí donde florecen los lagos,
germina el desconsuelo de su alma,
redonda naranja nocturna.

Bajo el cielo raso
explota la piel de los barcos,
indefensa voluntad del amor
en alas de acero inoxidable.

Bajo el cielo raso
camina la puerta del encuentro,
suena la campana de tu nombre,
duerme el reloj de mi tiempo.

Bajo el cielo raso
hay un mangle mental,
el gris semblante de la luna,
la última broma de la soledad.


Flor González

12/04/08 Rememorando la cadencia de las manzanas.

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